En 2016, el mundo sabía que Donald Trump había ganado la presidencia cuando se despertó la mañana siguiente al día de las elecciones.
En 2020, la carrera no se declaró ganadora para Joe sino hasta el sábado siguiente.
Este año, cualquiera de los dos plazos es concebible, dependiendo de lo reñida que sea la carrera.
Si el resultado se reduce a unos pocos miles de votos en un puñado de Estados, podríamos estar ante una espera al estilo de 2020.
Pero si un candidato supera las encuestas actuales, que muestran la carrera más reñida en muchos años, el resultado podría estar claro mucho antes.
Votantes rellenan sus boletas para las elecciones presidenciales durante la votación anticipada antes del cierre de las urnas el 5 de noviembre en la Oficina Electoral de Detroit, Michigan, EE.UU. 28 de octubre de 2024. REUTERS/Rebecca Cook¿Qué pasó en 2020?
Las elecciones de 2020 se celebraron el martes 3 de noviembre, pero siete Estados decisivos (Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin) seguían sin declarar a la mañana siguiente.
Associated Press declaró ganador a Biden en Michigan y Wisconsin el miércoles, lo que lo dejaba al borde de una mayoría en el Colegio Electoral, pero sin superar el umbral.
Luego, debido al tiempo requerido para contar los votos por correo, que se emitieron en mayor número que nunca debido a la pandemia, la nación observó cómo los resultados llegaban lentamente durante tres días antes de que se anunciaran más Estados.
No fue sino hasta el sábado 7 de noviembre que las organizaciones de noticias confirmaron a Biden como el ganador de Pensilvania y, con ello, la presidencia. (Nevada, Georgia, Arizona y Carolina del Norte anunciaron incluso más tarde, pero el veredicto general llegó poco antes del mediodía del sábado).
La noche de las elecciones, entender cómo se inclinan los Estados puede ser complicado por los «espejismos» rojos y azules:
artefactos de algunos estados que cuentan los votos por correo antes que los votos en persona, y algunos estados que hacen lo contrario.
Debido a que los demócratas tenían una probabilidad desproporcionada de votar por correo y los republicanos una probabilidad desproporcionada de votar en persona, a veces un candidato parecía estar muy por delante, solo para que el otro candidato avanzara más tarde.
¿Eso significa que algo salió mal?
No. Aunque Trump se aprovechó de los espejismos para intentar reforzar sus afirmaciones de fraude (y él y sus aliados pueden volver a hacerlo), los resultados no cambiaron.
El panorama inicial estaba incompleto y pasaron unos días hasta que quedó claro.
Si bien los estadounidenses estaban acostumbrados antes de 2020 a saber quién ganó la noche de las elecciones (al menos, dejando de lado el año 2000), el recuento de votos en las elecciones estadounidenses modernas nunca se ha completado en un día.
Antes de la pandemia de COVID, las organizaciones de noticias como The Associated Press solían tener suficiente información la noche de las elecciones para indicar quién había ganado, pero eso no significaba que los resultados estuvieran todos listos.
Ese fue el gran cambio en 2020:
debido al aumento del voto por correo y la división partidista en cuanto a quién lo utilizó, la parte de los resultados disponibles la noche de las elecciones no fue lo suficientemente representativa del total como para hacer proyecciones en carreras reñidas.
¿Hay algo diferente esta vez?
Es probable que la composición del voto anticipado y por correo sea menos desproporcionadamente demócrata, ya que más republicanos aprovechan esas opciones.
Y algunos Estados, incluido Michigan, han cambiado sus leyes para permitir que los trabajadores electorales comiencen a procesar las boletas de voto por correo antes del día de las elecciones, lo que debería acelerar la presentación de informes.
Pero seguirá habiendo disparidades partidistas dentro de cada método de votación, y muchos estados no han cambiado sus reglas, por lo que es poco probable que el panorama fundamental sea diferente.
¿Cuándo es lo más temprano que podríamos conocer los resultados?
Las urnas en los siete estados clave que determinarán la carrera presidencial cerrarán entre las 7 y las 10 p.m., hora del este.
Los primeros indicios de cómo va la noche llegarán en Georgia poco después de las 7 p.m. y en Carolina del Norte después de las 7:30 p.m.
Si la vicepresidenta Kamala Harris obtiene buenos resultados en esos Estados, eso podría sugerir que el resultado no se reducirá únicamente a los llamados estados del Muro Azul, Michigan, Pensilvania y Wisconsin, donde el recuento es más lento.
Por el contrario, si Trump está ganando los campos de batalla del sur, Harris todavía tendrá un camino plausible hacia la victoria a través del Muro Azul, pero tendremos que esperar más tiempo para saberlo.
Las urnas cierran a las 8 p.m.
Las horas de cierre de la votación en Michigan y Pensilvania son las 21.00 horas, en Wisconsin y Arizona las 22.00 horas y en Nevada las 22.00 horas.
c.2024 The New York Times Company
