Cuando el presidente Donald Trump y su par ruso Vladimir Putin van a discutir el martes el póker de la guerra en Ucrania, Europa está siendo ignorada. Pero ha decidido estar lista para intervenir.
El primer ministro británico Sir Keir Starmer está dispuesto a estacionar miles de soldados británicos en Ucrania “durante años” para mantener un alto el fuego y disuadir una nueva invasión rusa.
Tropas ucranianas entrenan con soldados británicos Foto:EFEEl premier está dispuesto a comprometerse indefinidamente a desplegar tropas británicas, «durante el tiempo que sea necesario», junto con sus aliados occidentales, en un esfuerzo por mantener la paz.
Los jefes de defensa de la «coalición de los dispuestos» a participar se reunirán en Londres el jueves para debatir con gran detalle dónde debería desplegarse la fuerza de paz.
Media docena de países listos y 30 mil hombres
Alrededor de media docena de países, entre ellos el Reino Unido, Francia, Turquía, Canadá y Australia, están negociando planes para enviar hasta 30.000 soldados a Ucrania. Otros países están dispuestos a ayudar con armamento y logística.
Sin embargo, el primer ministro se ha negado a confirmar si la fuerza de paz estará autorizada a abrir fuego contra soldados rusos en caso de ataque. Es probable que las «reglas de enfrentamiento» se discutan en los próximos días.
Una media docena de países están negociando planes para enviar soldados a Ucrania. Foto: EFEEl plan consiste en un alto el fuego «en el aire y en el mar» para que cualquier posible incumplimiento por parte de Rusia pueda ser fácilmente monitoreado. A este le seguiría un alto el fuego total, incluyendo a las fuerzas terrestres. Las tropas occidentales serían enviadas a Ucrania una vez que se alcance un acuerdo de paz.
Rusia rechaza fuerzas de paz
Rusia ha reiterado su rechazo a la presencia de una fuerza de paz en Ucrania. El presidente francés, Macron, afirmó que Rusia no tendrá voz ni voto en el despliegue de tropas extranjeras.
«Si Ucrania solicita la presencia de fuerzas aliadas en su territorio, no le corresponde a Rusia aceptarlo o no», declaró el jefe de estado francés el sábado.
Una fuente gubernamental de alto rango afirmó que el despliegue británico sería indefinido. «Sería un compromiso a largo plazo; estamos hablando de años», declaró la fuente. «El tiempo que sea necesario para preservar un acuerdo de paz y disuadir a Rusia».
Garantía de seguridad de Washington
Sin embargo, Starmer ha sido claro al afirmar que el Reino Unido no enviará tropas a Ucrania, “sin una garantía de seguridad de Estados Unidos”.
Trump se ha negado repetidamente a dar dicha garantía, sugiriendo que imperativos económicos, como un acuerdo sobre minerales entre Estados Unidos y Ucrania, serían suficientes para disuadir a Rusia.
El primer ministro británico ha argumentado que no se puede confiar en Putin. Acusó a Putin de «jugar con sus juegos», tras retrasar su compromiso con el alto el fuego de 30 días.
Marco Rubio, secretario de Estado de EE.UU., llamó a su par ruso, Serguéi Lavrov, el domingo para tratar «aspectos concretos de la implementación de los entendimientos», tras las conversaciones entre EE.UU. y Rusia en Arabia Saudita.
Todos los líderes militares en Londres
Tras una conferencia telefónica con 29 líderes el sábado, Starmer anunció que líderes militares de todo el mundo se reunirán en Londres esta semana, mientras los planes para la fuerza multinacional de mantenimiento de la paz pasan a una «fase operativa».
El jueves, John Healey, secretario de Defensa, se reunirá con los jefes militares en el Cuartel General Conjunto Permanente, el cuartel general británico tripartito en Northwood, al noroeste de Londres, donde se planifican y controlan todas las operaciones militares en el extranjero.
En una conferencia de prensa en Downing Street, Starmer afirmó que «el mundo necesita actuar ya». Informó que se habían asumido «nuevos compromisos» sobre el mantenimiento de la paz y el endurecimiento de las sanciones contra Rusia durante la llamada, en la que participaron Macron y el presidente Zelenski.
Rechazando la postura de Putin de «sí, pero…» ante una propuesta de alto el fuego con Ucrania, el primer ministro afirmó que el presidente ruso tendría que negociar «tarde o temprano».
El gobierno alemán, por su parte, denunció una «táctica dilatoria» por parte del Kremlin. Tras no haber logrado convencer a Donald Trump de que es esencial seguir apoyando a Ucrania, las capitales europeas ahora esperan que la intransigencia de Vladimir Putin finalmente le abra los ojos.
Alemania: búnkeres y chalecos antibala
Los alemanes se sienten inseguros en este clima. En Berlín, los supermercados Norma han comenzado a vender habitaciones antipánico, que resisten hasta los balazos de una Magnum, y chalecos antibalas. Justo cuando el gobierno alemán anuncia un rearme de 800.000 millones de euros de sus fuerzas militares y apoya una defensa europea.
Los supermercados Norma venden chalecos antibalas y habitaciones seguras blindadas, ya que el 60% de los alemanes afirma sentirse inseguro y un tercio teme ser víctima de delitos violentos. La sensación de una creciente amenaza a la seguridad personal es generalizada entre los clientes de Norma.
Los clientes alemanes ahora pueden invertir en una habitación del pánico emergente, disponible en acero blindado, que resiste balas desde calibres 9 mm hasta Magnum 44. Para cuando estén fuera de casa y no puedan refugiarse en su lugar seguro, también pueden comprar chalecos antibalas para caminar por la calle.
“Hay peligro, guerra y terrorismo por todas partes”, dijo Marlies, de 78 años, quien nació dos años después de la Segunda Guerra Mundial y recuerda vívidamente las historias de su familia, en especial las de su padre, quien sirvió como soldado en el conflicto.
Los chalecos antibalas de la cadena de descuento están disponibles por 599 euros en un plazo de 8 a 14 días laborables. Las habitaciones de pánico tienen un precio inicial de 13.999 euros y un búnker reforzado cuesta 4.999 euros.
La descripción de la habitación de pánico dice: «Con su construcción de alta calidad y sus especificaciones precisas, ofrece la fiabilidad necesaria en situaciones de crisis».
Wolfgang Stütz, miembro de la junta directiva de Norma, declaró al periódico sensacionalista alemán Bild: «Observamos que el interés en el tema de la seguridad ha aumentado considerablemente debido a la actual situación política mundial».
En Suiza es obligatorio el búnker
En Suiza cada edificio o casa tiene un búnker antinuclear. Con los años, tras la guerra fría, lo habían transformado en una “cave” para el vino. Pero la tensión mundial los ha rehabilitado.
La Confederación dispone de un número récord de ellos (con más plazas en refugios que habitantes) gracias a una ley suiza, que los hizo obligatorios desde 1963 para toda construcción de vivienda o edificio.
Suiza cuenta con 360.000 refugios y 5100 son mantenidos públicamente para la protección civil. Los demás están en edificios privados. Puede proteger a 8,6 millones de personas. El único país del mundo que podría proteger a toda su población en los bunkers.
La ley exige que existan baños, aire fresco y suficientemente camas. También hay requerimientos de construcción y espesor de las paredes.
En el corazón de Lucerna, el refugio de montaña Sonnenberg es uno de los más grandes del mundo.
«El edificio tiene 70 metros de largo, 20 metros de alto y siete plantas en total. Es como un pequeño rascacielos en el interior del monte Sonnenberg«, explica Zora Schelbert, directora de la asociación Survivre Sous Terre, que organiza visitas guiadas a las instalaciones.
