Esta semana en la Argentina, al menos en el aspecto futbolístico, la atención estará dedicada a la selección. El campeón del mundo se medirá el próximo jueves con Venezuela, en el estadio Monumental de River, por las Eliminatorias para la Copa del Mundo 2026. Se tratará del último partido oficial en el país antes del Mundial, al que ya está clasificado; además, será la función final del capitán, Lionel Messi, en el país, al menos en forma oficial.
Claro que, más allá de la comodidad que luce el equipo, hay otros aspectos valiosos con miras al futuro. Uno de ellos es la realización de la Finalissima, el certamen intercontinental -a partido único- que enfrenta a los últimos campeones de la Copa América -Argentina- y la Eurocopa -España-. El trofeo se jugará entre el 26 y el 31 de marzo, según el calendario aprobado por la FIFA, en una sede a confirmar. Para el DT Lionel Scaloni la fecha es un problema.
“Hubo tiempo para hacerla antes. España no pudo por la Nations League, que la inventaron ellos, y a Sudamérica nos mató. Hubiese preferido no jugar la Finalísima antes del Mundial”, reconoció Scaloni en un reportaje en TNT Sports.
Más allá de la logística, la intranquilidad de Scaloni pasa por el escaso tiempo que habrá entre Finalissima y el Mundial que se disputará en los Estados Unidos, México y Canadá. “Ganar es muy difícil y hacerlo contra selecciones de ese nivel es complejo. No hay que cometer errores. Lo importante es sentirnos capaces de pelear por un Mundial. Vamos a trabajar mucho en los meses que nos quedan, hay que tener fortuna de que no haya lesiones”, añadió el entrenador.
Durante la misma entrevista, Scaloni se refirió al paso que dio Rodrigo De Paul en su carrera, emigrando de Europa (de Atlético de Madrid) para sumarse a Inter Miami. “Yo creo que a Rodrigo lo conozco bien y sé muy bien lo que puede dar. Yo hablé con él y mi respuesta fue la misma que le damos a todos, que es que no valoramos dónde juegan, sino su rendimiento”, dijo el DT.
Y aportó sobre De Paul, una pieza clave en su seleccionado: “Si sigue siendo el que nosotros creemos que es bueno para la selección, seguirá estando. Dependerá exclusivamente de él, pero conocemos su manera de entrenar y cómo se cuida”.
Scaloni opinó sobre la llegada de Leandro Paredes a Boca: “Es un placer verlo jugar. Ya lo dijo (Miguel) Russo, él es uno de los mejores futbolistas que ha tenido. Con nosotros ha jugado, ha salido, ha estado en el banco, pero eso no quita que sea para mí fundamental, sea tanto adentro como afuera. Es un jugador que con la pelota, como él, hay muy pocos. Tiene un criterio para jugar que realmente es increíble y yo creo que jerarquizó el fútbol argentino. Y va a ser especial para Boca”.
El entrenador campeón del mundo en Qatar 2022 reconoció que tuvo sentimientos encontrados con la llegada de Ángel Di María a Rosario Central, precisamente por su pasado en Newell’s. “Pero me alegró un montón por él, porque sé muy bien lo que representa Rosario Central para él. Es un pibe espectacular, noble, y parece que estaba escrito en su historia haber vuelto y haber podido hacer ese gol. Por eso, desde el punto de vista de todo lo que lo queremos, es una alegría enorme. La verdad estoy muy contento por él”.
Mientras tanto, desde hoy van arribando al país varios jugadores de la selección argentina para enfrentar al conjunto Vinotinto, dirigido por el argentino Fernando Batista y que sueña por llegar por primera vez a un Mundial. De hecho, es la única de las diez selecciones sudamericanas que participan en las Eliminatorias que todavía no tuvo ese privilegio en su calendario deportivo.
A falta de dos fechas para la culminación del camino hacia el Mundial 2026, Venezuela ocupa el séptimo puesto (la zona de repechaje). Con 18 unidades, tendrá un complicado choque con Argentina y en la última fecha se medirá de local frente a Colombia. En tanto, la selección argentina consiguió el pasaje mundialista de manera anticipada y encabeza la tabla con 35 puntos, 10 más que Brasil y Ecuador.