Pipo Gorosito, entrenador argentino de Alianza Lima (Perú), dejó una polémica frase sobre el final de la conferencia de prensa posterior al partido de su equipo contra la Universidad de Chile, por la vuelta de los cuartos de final de la Copa Sudamericana. El 1-2 en Coquimbo, a puertas cerradas por la sanción que pesa sobre el club trasandino tras los incidentes en el Libertadores de América durante el partido de vuelta contra Independiente, eliminó al conjunto peruano del segundo torneo en importancia del continente.
A Gorosito, ídolo de Universidad Católica, el archirrival de U de Chile, lo consultaron por un altercado en la zona de vestuarios, tras el partido. Y Pipo prendió el ventilador. “Sí, un señor de barba…”, comenzó, tratando de individualizar a alguien que se había burlado. Luego, deslindó responsabilidades: “De los jugadores no, eh. Entre los jugadores, no. Nada que ver. Con el cuerpo técnico tampoco”. Y, por último, Gorosito atacó: “Un señor de barba de acá cargó, qué se yo; y un flaco alto, no sé si es el presidente [en alusión a Michael Clark, máximo directivo de Azul Azul, la gerenciadora de la U], no sé quién es, dijo: ‘Vayanse para casita’. Un desubicado. Porque nosotros no decimos que ellos estuvieron con el culo…, mostrando el culo en Argentina”.
El entrenador argentino prosiguió con su explicación, en lo que fue la última pregunta de la conferencia de prensa: “Entonces no sé quién es el señor, no tengo idea. Que si es un directivo tiene que apaciguar, no tiene que incentivar a la violencia, que no conduce a nada y no cambiaba nada, en el partido estuvieron bien, allá [en Lima] no tuvieron ningún problema, entonces… innecesario, pero entre los jugadores y el cuerpo técnico no hubo ningún problema”, completó Gorosito.
Clark, el dirigente cuestionado por el DT argentino, recogió el guante. Y negó la acusación. “Yo no fui”, se excusó, citado por El Mercurio. Y continuó: “Venía bajando y no tengo nada que ver. Es ensuciar el tema. Alianza Lima hizo mucho ruido estos días, pero acá no pasó nada. Yo al menos no lo hice. Hay cosas que no deberían pasar, pero pasan. Yo fui a Lima y siempre me insultaron desde que me bajé del avión. Esas cosas no deberían pasar, pero es parte del fútbol. Hay que tener piel un poquito más gruesa, la verdad”, aconsejó, en relación con la tolerancia que debería haber para determinadas cuestiones que ocurren en una cancha de fútbol.
Lo mejor del triunfo de Universidad de Chile contra Alianza Lima
Las palabras de Gorosito enardecieron a algunos medios chilenos. Para La Tercera, el DT argentino -que como futbolista conformó una gran dupla de ataque con Alberto Federico Acosta en la Universidad Católica– “se mofó de la barbarie” ocurrida en la cancha de Independiente, y que motivó la desclasificación del equipo argentino del torneo. En Radio Bio Bio abundaron: “Es conocido por declarar de más tras los partidos, sobre todo cuando sufre una derrota”.
A la hora de hablar del partido propiamente dicho, Gorosito opinó: “Estamos muy dolidos, teníamos mucha ilusión de llegar a la final. Nos enfrentamos con un buen equipo, lamentablemente los goles llegaron al principio del partido. Después, en el segundo tiempo, tuvimos algunas ocasiones por empuje. Por ahí, el resultado refleja lo que pasó en el partido, fue muy parejo. Ellos encontraron el gol, me parece que Billy [por el boliviano Guillermo Viscarra, arquero de su equipo] no atajó más tiros en el primer tiempo. Al final tuvieron una doble ocasión. Nosotros tuvimos para empatar tras un cabezazo de Paolo [por Guerrero]. Teníamos mucha ilusión, lamentablemente en este partido nos ganaron”, declaró Gorosito.
Alianza Lima jugó esta serie de cuartos de final contra Universidad de Chile tras la decisión de la Conmebol de descalificar a Independiente luego de los incidentes en el Libertadores de América, durante el partido de vuelta de los octavos de final. La entidad rectora del fútbol sudamericano citó a los representantes legales de ambos clubes a una audiencia, escuchó sus explicaciones y acopió toda la documentación sobre los hechos, que motivaron varias denuncias penales en Avellaneda.
Los chilenos avanzaron a los cuartos de final con una fuertísima multa económica (US$ 270 mil), además de siete partidos internacionales como local a puertas cerradas y la prohibición de llevar simpatizantes propios a los próximos siete encuentros internacionales como visitante. En el marco de esta sanción es que el partido ante los peruanos se jugó a puertas cerradas y en el estadio de Coquimbo. Ahora tendrá que volver a la Argentina (y a la provincia de Buenos Aires): su rival en semifinales es Lanús.