“Cada uno es libre de opinar con lo que sepa”. El padre de Alcaraz respondió de esa manera al ser consultado por la prensa de su país sobre los dichos emitidos en la víspera por Juan Carlos Ferrero, en una entrevista con el diario español Marca.
Ferrero habló con ese periódico una semana después del anuncio de la separación con Alcaraz y admitió sentirse “dolido por el divorcio”, pero también “con una sensación de paz por haber cumplido con su deber” y que “personas cercanas a Carlos” consideraron que era mejor la interrupción de su vínculo.
La prensa española consideró que Ferrero se refería al padre de Alcaraz, el crack que ganó 24 títulos (6 de Grand Slam) además de haber llegado al tope del ranking por primera vez con 19 años en 2022.
Los mismos reportes sugirieron que Alcaraz, de 22 años, eligió a Samuel López (55 años) como reemplazante de Ferrero (45), a quien ese entrenador comenzó a asistir en 2024.
El padre de Alcaraz declinó realizar más comentarios sobre Ferrero, quien manifestó su deseo de continuar en su cargo luego que el número 1 del mundo aseguró que la decisión de la separación fue “consensuada”.
Ferrero, que en su exitosa carrera como tenista fue campeón de Roland Garros y finalista del US Open en 2003, empezó a entrenar tras su retiro al alemán Alexander Zverev, con quien comenzó a trabajar en 2017.
El propio Ferrero sorprendió en la víspera al revelar que aceptaría en caso de recibir “una oferta de Jannik Sinner”, el tenista italiano que escolta a Alcaraz en el ranking de la ATP y a quien calificó como “un jugador extraordinario”.
“Es normal sentirse apenado. Es una noticia triste para el mundo del tenis y para todo el equipo. Éramos un equipo muy unido y por ciertos puntos no se puede seguir y estamos todos un poco apenados”, confesó Ferrero en una entrevista con TVE.
En cuanto a cualquier problema contractual, el extenista aclaró que “a final de cada año siempre se repasa el contrato por si hay ciertas novedades sobre todo por parte de ellos. Al final hubo ciertos puntos en los que no hemos podido ponernos de acuerdo. Obviamente, no voy a entrar en detalles, pero ya se sabe que al final en aspectos deportivos siempre hay ciertos contratos y ellos piensan que lo mejor eran unos puntos y yo otros”, advirtió.
“Al final, hemos vivido algo muy especial, muy bonito, todo el equipo, y el cariño siempre va a estar ahí. Aunque no nos pongamos de acuerdo en ciertos puntos, la amistad va a seguir siendo absolutamente la misma y desde aquí le deseo un 2026 con muchos éxitos y que siga creciendo como jugador que ha sido el objetivo siempre de todos”, subrayó.
Ferrero insistió en que “la relación es buena con todos” los que rodean al número uno del mundo y recalcó que no quería “señalar a nadie”. “Siempre ha sido una relación desde que empezamos muy buena y siempre puede haber aspectos a debatir entre todos, por eso hemos sido siempre un equipo y lo hemos sacado adelante. Esta vez no ha sido así y hay que aceptarlo e intentar salir hacia adelante”, afirmó.
“¿Con qué me quedo? Con las experiencias, los recuerdos. Hemos vivido una historia muy bonita en la que él era un jugador con un potencial impresionante y tanto el equipo como yo hemos sido capaces de sacar esos sueños que tenía él dentro y poder cumplirlos. Lo vamos a recordar todos con muy buenos ojos. El legado que se deja es muy bonito y, de corazón, Carlos, que te vaya muy bien, a ti y a todo el equipo, ya sabes que aquí siempre me vas a tener”, añadió el exnúmero uno del mundo.
Ahora, de cara al 2026 y del primer grande de la temporada en Melbourne (Australia), donde podría completar el Grand Slam, le recomienda que entrene “con las mismas ganas, entrega y lucha de siempre y prepararse lo mejor posible”.
“Creo que es un torneo que es especial para él porque es el único que le queda en cuanto a Grand Slam, pero desde adentro siempre lo hemos intentado vivir con normalidad y sin demasiada presión, que es lo que tiene que hacer, intentar ir por ello y ya está”, sentenció.
El primer coach del joven murciano, Carlos Santos, apuntó duramente contra su padre al responsabilizarlo de la ruptura. “Yo no había pensado en eso, pero hablando con mi mujer, me lo dijo: ‘Mira, más o menos le ha pasado como te pasó a ti’. Pensándolo un poco, al final ahí el que lleva un poco todo es el padre de Carlos. Carlitos no tiene nada que ver ahí. O sea, si era por Carlitos, hubiera seguido el tiempo que hubiera querido Juan Carlos”, sostuvo.

