Aunque el número de millonarios en China se ha reducido en 2024, los empresarios chinos continúan posicionándose entre las mayores fortunas del mundo. Nombres como el de Zhongshanshan, fundador y presidente de la marca de bebidas Nongfu Spring, llevan más de una década entre las mayores fortunas del país, con un patrimonio estimado en 62.300 millones de dólares.
No obstante, hay nuevos nombres que han seguido los pasos del carismático Jack Ma surgidos al calor de las nuevas tecnologías y los modelos de comercio online. El que más tinta está haciendo correr recientemente es Colin Huang, dueño de la aplicación de compras Temu, que ha llegado a tocar la cima como el hombre más rico de China.
La alegría le duró poco, solo unos días más tarde, una brutal caída del 30% en el precio de las acciones de su compañía le hacía perder su posición. En cualquier caso, según Forbes, mantiene la tercera posición en la lista de mayores fortunas de China con un patrimonio de 35.700 millones de dólares.
Un millonario hecho a sí mismo
Colin Huang nació en 1980 en Hangzhou, a 170 km al suroeste de Shanghái, en el seno de una humilde familia de obreros. Desde la escuela, el joven Huang demostró tener un talento excepcional para las matemáticas, participando en algunas competiciones de esa disciplina. Eso le permitió cursar Informática en la Universidad de Zhejiang, y obtener una beca para seguir sus estudios en la Universidad de Wisconsin, donde cursó un Máster de Ciencias de la computación.
Mientras estudiaba, Huang hizo prácticas en Microsoft y Google, donde finalmente entró a trabajar como ingeniero al finalizar sus estudios. En 2004, todavía como empleado de Google, volvió a China para intentar implantar el buscador de la compañía en el país, pero no pudo derribar los límites de la censura que imponía el Gran Cortafuegos chino.
Convertir un mercado local online en mercado global
Huang terminó abandonando Google para iniciar su propio camino fundando empresas relacionadas con el comercio electrónico y los juegos en línea. Uno de sus primeros éxitos empresariales fue la empresa de juegos online Xunmeng.
Tras una serie de emprendimientos, Huang fundó Pinduoduo en 2015, inspirándose en el modelo de Alibaba. La idea inicial de Colin Huang para Pinduoduo era crear un mercado de productos frescos online accesible para cualquier comerciante, desde pequeños agricultores hasta grandes empresas. Con el tiempo, la plataforma amplió su catálogo a todo tipo de productos. Se había creado el germen de lo que iba a ser su futura joya de la corona.
Tras el éxito de la plataforma en China, el millonario se propuso extenderla a occidente. En 2018, la empresa comenzó a cotizar en la Bolsa de Nueva York y cambió su nombre a PDD Holdings para allanar el terreno a los cambios que se avecinaban con la llegada de su máximo éxito hasta la fecha: Temu.
El poder en la sombra: una lección de Jack Ma
Huang aprendió la lección que dejó la experiencia de Jack Ma al frente de Alibaba, forzado a ceder su liderazgo “a las malas” ante la presión del gobierno chino y los controles antimonopolio. Por ello, Huang renunció como director ejecutivo de PDD Holdings en 2021, dejando el bastón de mando a Lei Chen, que actualmente ejerce como presidente del grupo. No obstante, Huang se mantiene como el poder en la sombra de la compañía porque continúa siendo su mayor accionista con el 28% de las acciones.
En 2022, Huang lanzó Temu en Estados Unidos, una plataforma de compras online de bajo costo que rápidamente se expandió a más de 50 países. Temu combina comercio y juegos en línea, una táctica que a Huang le había funcionado en el pasado. Utilizando una estrategia de marketing agresiva y precios muy competitivos, la aplicación ha logrado atraer a millones de usuarios, lo que ha contribuido significativamente al crecimiento exponencial de la fortuna de Huang.
El éxito de Temu, al igual que el de Shein, se basa en un modelo de producción de bajo coste con exención de impuestos y aranceles, que ponen en entredicho las a la plataforma por competencia desleal ya que no juegan con las mismas reglas que el resto de comercios locales. La Comisión Europea planea acabar con estas ventajas fiscales en 2024, obligando a Temu y otras empresas a pagar impuestos sobre productos de bajo valor.
Imagen | Midjourney