Hay un nuevo primer ministro en Europa. Uno poco ortodoxo. Tanto por su trayectoria profesional, como por el país que lidera. El famoso critoempresario chino Justin Sun, fundador de la red blockchain TRON, acaba de situarse al frente del Gobierno de la República Libre de Liberland, un microestado de apenas siete kilómetros cuadrados y un millar de ciudadanos situado entre Croacia y Serbia, a orillas del río Danubio, y que se autoproclamó soberano hace nueve años.
Ni Croacia ni Serbia lo reconocen, pero eso no ha impedido a sus impulsores seguir adelantea y elevar a lo más alto de su Ejecutivo a un rey de las criptomonedas.
¿Qué es Liberland? Un microestado, igual que hay otros tan o incluso más peculiares, como Sealand, una antigua plataforma flotante del Mar del Norte que tiene su propia familia real desde hace décadas; o el peculiar «Vaticano musulmán» de 11 hectáreas que el primer ministro de Albania quiere crear al este de Tirana.
La historia de Liberland se remonta a 2015, cuando el activista libertario Vít Jedlička y Jana Markovicova decidieron autoproclamar la nueva república en un terreno a orillas del Danubio que, consideraban ellos, era «tierra de nadie». En su opinión no lo reclamaba Croacia, ni Croacia, ni ningún otro país u organización. La juzgaron libre. Así que… ¿Qué mejor que fundar la República Libre de Liberland?
¿Por qué es noticia ahora? Exactamente por la misma razón que lo fue Italia tras la llegada de Giorgia Meloni o Reino Unido con Keir Starmer. Liberland acaba de estrenar primer ministro. Así lo informó el microestado hace unos días, a través de su web, en la que colgó una nota explicando que el criptoempresario Justin Sun había ganado las elecciones al Congreso de la nación. Tras los comicios, Vit Jedlička, el presidente, lo ha designado ya primer ministro en funciones.
Curiosamente tanto Sun como el empresario indio Evan Luthra, otra de las personas que pasarán a tener un cargo de responsabilidad en el Gobierno, son dos «recién llegados» al microestado. Eso no parece sin embargo un problema para el aparato de Liberlad, que destaca otras cualidades de los dos candidatos.
«Han demostrado de forma constante que son empresarios consumados en el espacio de las criptomonedas. Su trayectoria […] será fundamental para hacer avanzar nuestros proyectos de blockchain y su habilidad y dedicación prometen beneficiar a Liberland en su conjunto», argumentan desde la micronación.
¿Quién es Justin Sun? Un empresario bien conocido en el mundo de las criptomonedas. De 34 años y oriundo de Xining, en China, Justin es el fundador de la red TRON (TRX) y en 2017 Forbes llegó a incluirlo en su popular lista «30 under 30» para Asia en el sector tecnológico. En su currículum tenía, entre otros méritos, el lanzamiento de la aplicación Peiw. El nombre del emprendedor chino sonó con fuerza también en 2023, cuando la Comisión de Bolsa y Valores de EEUU (SEC) lo acusó a él y a sus empresas de “fraude y otras violaciones de la ley de valores».
¿Cómo lo han escogido? El comunicado sobre la designación de Justin Sun asegura que su sistema electoral se basa en blockchain y «elimina las dudas sobre los resultados de las elecciones, un desafío al que se enfrentan muchos países que aún dependen de métodos tradicionales». Para escoger a los cargos del Congreso se recurre funciona básicamente a un método de votaciones por niveles en el que se opta por varios candidatos. El sistema se basa en el algoritmo Phragmén.
¿Sabemos más? Sí. Liberland, que mide apenas 7,2 km2, deja unas cuantas pinceladas en su web, en la que se presenta como una «nación construida sobre principios libertarios» que «fusiona las mejores características de la democracia directa con la gobernanza blockchain«. «Eso la convierte en un modelo pionero para el siglo XXI. Nuestro espíritu se inspira en el liberalismo clásico para ser la nación más libre del mundo. Nuestro lema: ‘Vivir y dejar vivir'», resume.
«Los ciudadanos pueden participar directamente en el proceso democrático votando referendos y propuestas en función de sus méritos (LLM). Toda nueva legislación debe ser confirmada por un referéndum ciudadano. El blockchain garantiza que el proceso de votación sea seguro, a prueba de manipulaciones y fácilmente auditable por todos los participantes», reivindica la nación.
¿Y cómo votan? «El poder político de los ciudadanos es proporcional a la cantidad de impuestos que pagan. El proceso de pagar impuestos mediante la participación en el LLM se denomina ‘polling político’ y es necesario para obtener la ciudadanía y emitir votos», aclara. En el canal de YouTube que lleva su nombre, Liverland aclara que el Liberland Merit (LLM) es el token político y de ciudadano del estado. «Se otorgan cuando las personas pagan impuestos voluntarios, por lo tanto representan las contribuciones financieras que ha hecho a Liberland. Cuanto más LLM apuesta un ciudadano, más influencia tendrá en los referendos».
¿Y qué hará ahora Sun? El estado asegura que entre sus «objetivos estratégicos» están su blockchain y las empresas de la nación. De hecho en el comunicado que informa de la elección de Sun y Luthra se destaca de ellos sus trayectorias y el impulso que pueden dar a los proyectos de blockchain. Liberland no lo tendrá fácil sin embargo para moverse en el escenario internacional. Aunque en 2015, captó la atención de medios de todo el mundo, incluidos The New York Times o The Guardian, uno de sus grandes mayores desafíos es de la legitimidad.
Cryopto Times recuerda que Liberland no está reconocida por ningún estado miembro de Naciones Unidas, incluidos los estados entre los que se sitúa, Serbia y Croacia. Eso no le ha impedido reivindicarse como «un país real» y apoyado en la Convención de Montevideo. A lo largo de los últimos años ha logrado también el respaldo de algunos dirigentes relevantes. “A nivel internacional Milei, Ron Paul (congresista de EEUU) han apoyado públicamente a Liberland», recuerdan.