Independiente continúa sumando futbolistas de cara a la temporada 2025. El entrenador del Rojo, Julio Vaccari, ya cuenta con cinco refuerzos. A los arribos confirmados de Pablo Galdames, Luciano Cabral, Nicolás Freire y Sebastián Valdez, se sumó Rodrigo Fernández Cedrés, que fue presentado de manera oficial y reforzará el mediocampo del equipo de Avellaneda. El nacido en Uruguay, tiene una historia de vida muy particular. Se crio en Miami y mientras jugaba al fútbol fue descubierto en torneo que se disputó en Disney. Además, participó de un fuerte cruce con Lionel Messi y Luis Suárez en un partido amistoso disputado el año pasado.
Rodrigo Fernández Cedrés nació el 3 de enero de 1996 en Montevideo y se desempeña como volante central. El futbolista de 29 años pertenece a Santos de Brasil y llega a Independiente a préstamo por una temporada, sin cargo y sin opción de compra, pero con la particularidad de que su vínculo con el club brasileño finaliza en diciembre, y al terminar el año podría negociar libre con el Rojo.
Fernández Cedrés comenzó su carrera en Danubio en 2016. Luego se fue a Guaraní de Paraguay, donde disputó más de 100 partidos y ganó roce internacional jugando Copa Libertadores. Su buen nivel en el fútbol paraguayo le valió el traspaso a Santos a principios del 2022. Más allá de que acumuló 86 encuentros con el equipo paulista, pero su recuerdo allí no es el mejor porque, durante su estadía, el equipo descendió por primera vez en su historia.
En 2024 pasó a préstamo a Newell’s y disputó 31 partidos. Con la camiseta del Leproso fue uno de los mediocampistas más destacados del fútbol argentino durante los primeros meses del año pasado. Su buen nivel coincidió con el buen arranque del equipo que por entonces dirigía Mauricio Larriera. Con el correr de los meses la producción futbolística del conjunto rosarino decayó notoriamente y terminó vagando por los últimos puestos de la Liga Profesional.
Sus características son las de un volante de quite y primer pase. Es sólido y agresivo en la marca (sumó 16 amonestaciones y dos expulsiones en el 2024 y acumula 120 amarillas en toda su carrera). Puede desempeñarse como doble cinco, pero se siente más cómodo jugando solo en la contención. En ese puesto, Independiente tiene en el plantel al capitán del equipo, Iván Marcone y también a David Tata Martínez.
Pero Rodrigo Fernández Cedrés tiene una historia muy singular. Cuando era niño, se fue a vivir a Miami por el trabajo de su padre y allí continuó su pasión por el fútbol. Durante tres años jugó en East Broward United. En la final de un torneo de fútbol 5 en Disney convirtió tres goles y allí fue descubierto por Daniel Lindner, el presidente de las juveniles del club Danubio de Uruguay. El dirigente lo vio y le dijo que cuando volviera a Uruguay fuera al club a jugar.
Cuando el padre regresó a Sudamérica, Fernández Cedrés tenía 10 años y solo necesitó probarse durante diez minutos para que el técnico lo fichara con el equipo que sería su casa durante los próximos 12 años. En 2016 debutó en primera y jugó 64 partidos oficiales. Sin embargo, su salida del club no fue la mejor, debido a que le complicaron algunos traspasos hasta que decidió quedar libre para irse a Guaraní.
Inter Miami disputó un amistoso contra Newell’s Old Boys en febrero del año. El partido terminó 1 a 1, pero las acciones que quedaron en el centro de la escena fueron los picantes cruces que protagonizó Fernández Cedrés con Lionel Messi y su compatriota Luis Suárez.
Su primera disputa fue luego de un enfrentamiento con Suárez. El delantero quiso gambetearlo con un caño, pero el mediocampista logró recuperar la pelota con una dura marca. Más tarde, el exBarcelona le dio un codazo a Fernández Cedrés. Ambos continuaron con las discusiones picantes adentro del área previo a un tiro de esquina.
Minutos más tardes, Messi buscó defender a su compañero de equipo. El capitán de la selección argentina primero saltó con vehemencia a disputar una pelota y quedó a nada de darle un codazo al volante uruguayo. En la continuidad de la acción, el 10 le fue con la plancha, pero no pudo darle. Tras las dos actitudes del argentino, Fernández Cedrés no se quedó atrás y lo frenó bruscamente con el cuerpo.
En la siguiente jugada, el mediocampista que vestía la casaca de Newell’s quiso recuperar una pelota y le cometió una fuerte infracción al finlandés Robert Taylor. Cuando el árbitro cobró la infracción, Lionel Messi reaccionó y le tiró un pelotazo. Pese a la reacción, la situación no pasó a mayores y luego se calmaron los ánimos.
Al final del partido, el uruguayo declaró ante la prensa: “No había ambiente para sacarme una foto por lo que pasó en el partido. Estaba caliente y no me quise acercar. Son cosas que quedan ahí. Yo estaba haciendo mi trabajo. Juego igual con todo el mundo, y así será siempre”.
