Mendoza supo ser tierra prometida para el River de Marcelo Gallardo. Una ciudad teñida de rojo y blanco en inolvidables e históricas imágenes del ciclo más ganador de la historia. Pero, a lo largo de los últimos dos años, la provincia del sol y del vino se transformó en un dolor de cabeza que no lo ha parado de aquejar: lleva seis partidos sin poder ganar, entre oficiales y amistosos, en una racha negativa que tuvo cachetazos duros y determinantes. Recuperar ese idilio que se había generado será el objetivo del Millonario este jueves desde las 21.15 cuando se mida con Unión por los octavos de final de la Copa Argentina. Para seguir en la triple competencia deberá retomar la senda triunfal y por eso el DT piensa en un equipo descansado y ofensivo que podría tener por primera vez el esperado tridente de ataque.
La llegada a Mendoza se da con un solo gran interrogante: Paulo Díaz tiene un traumatismo en el tobillo izquierdo que lo marginó del duelo frente a Lanús y será evaluado hasta último momento. Si no llega, en su lugar estaría Lautaro Rivero. En tanto, Marcos Acuña, Enzo Pérez e Ignacio Fernández, quienes no estuvieron el lunes ante Lanús, volverán al equipo titular. La decisión del Muñeco fue clara: rotar en el Torneo Clausura y priorizar la Copa Argentina para intentar acceder a cuartos de final, instancia en la que espera Racing.
De esta manera, ante el Tatengue se podría dar por primera vez la presencia de los tres delanteros en el equipo, después del positivo ingreso de Maximiliano Salas para jugar el segundo tiempo en Lanús, luego de la lesiín que lo tuvo un mes al margen del equipo. Aprovechando el presente goleador de Sebastián Driussi, con 10 goles en sus últimos 14 partidos, el DT haría ingresar a ambos para compartir el frente de ataque con Facundo Colidio, quien le ganaría la pulseada a Juanfer Quintero.
¿El probable equipo? Armani; Montiel, Martínez Quarta, Díaz o Rivero, Acuña; Galoppo, Enzo Pérez, Nacho Fernández; Salas, Driussi y Colidio. Una formación que deberá potenciarse individual y colectivamente para tomar vuelo en un año marcado por los vaivenes: más allá de que River lleva 18 triunfos, 18 empates y solo dos derrotas en los 38 juegos del año, todavía no ha logrado ser confiable y convincente ni podido ganar un título: tropezó en la Supercopa Internacional con Talleres, en los cuartos de final del Clausura con Platense y en la fase de grupos del Mundial de Clubes.
Con ese probable equipo River intentará revivir los mejores recuerdos que forjó en el Malvinas Argentinas, que ya tiene populares y plateas agotadas para el público millonario. Fueron 18 partidos y más de 14 años sin perder en un estadio en el que además gritó tres veces campeón: ganó la Copa Argentina en 2017 ante Atlético Tucumán, la Supercopa Argentina en 2018 frente a Boca y la Copa Argentina nuevamente frente a Central Córdoba en 2019. La última caída se había dado el 21 de junio de 2009 en un 0-1 con gol de Iván Borghello para Godoy Cruz en el Torneo Clausura que dirigió Néstor “Pipo” Gorosito. A partir de entonces, se dio una seguidilla de 15 éxitos y tres igualdades que incluyó las 13 victorias en fila del Muñeco.
En total, hasta la fecha fueron 16 partidos oficiales de Gallardo dirigiendo a River en Mendoza, con los 13 primeros festejos consecutivos entre agosto de 2014 y agosto de 2021. La racha se cortó con la caída 2-1 frente a Godoy Cruz en el Estadio Feliciano Gambarte con una formación alternativa, mientras disputaba la Copa Libertadores. Y luego continuó sin poder imponerse en este segundo ciclo: perdió 2-1 con Independiente Rivadavia en noviembre en la Liga pasada, en su primer cachetazo en el Malvinas Argentinas, y empató 0-0 con el Tomba en la quinta fecha del Apertura.
Esos dos últimos compromisos se enmarcan en una continuidad negativa de resultados que rompió ese hechizo que se había generado. Porque ya son seis juegos sin victorias en Mendoza, pero con golpes dolorosos, sobre todo en el ciclo de Martín Demichelis. El primero fue la derrota 1-0 con Talleres en 16vos de final de Copa Argentina en julio de 2023, justo después de ser campeón de la Liga Profesional. Luego llegó el inesperado 0-4 en un amistoso en marzo de 2024 frente a Independiente Rivadavia durante la fecha FIFA. Y finalmente los dos golpes de knock-out para el ciclo del ex entrenador: empate 1-1 y derrota por penales con Temperley en mayo en 16vos de Copa Argentina y caída 2-1 con Godoy Cruz en un duelo de la Liga Profesional que derivó en la destitución de Micho.
Después de suspender la conferencia de prensa tras el 1-1 con Lanús, el Muñeco Gallardo volverá a Mendoza para intentar que el duelo con Unión sea una bocanada de aire fresco para un equipo que aún no halló su mejor versión. El técnico se fue visiblemente molesto del Sur del Gran Buenos Aires y en esta frenética semana con tres partidos en siete días ahora tendrá una oportunidad de lujo para volver a pisar firme en una provincia en la que supo escribir páginas doradas.