“No sé si hay aura o magia en el estadio. Pero amamos jugar acá”, la frase pertenece a Marcos Moneta, tras la victoria en los cuartos de final del sábado contra Francia. En el primer partido del domingo, el seleccionado argentino mantiene su “aura” ganadora en el majestuoso y hermético BC Place. Con una gran defensa superaron a España por 7-0 y se clasificaron a la final de Vancouver por cuarta vez consecutiva. “Nos analizaron bien y nos anularon. Pero este equipo tiene ese extra de inteligencia de sacar adelante estos partidos sin lindo juego, aguerridos”, admitió Joaquín Pellandini, uno de los cerebros adentro de la cancha.
Los Pumas 7s recibieron cuatro tries en sus cinco encuentros durante el fin de semana. Una referencia defensiva notable, forjada en un buen trabajo en los duelos individuales y en la presión grupal que le imprimen al rival de turno. Además, cuentan con Marcos Moneta como factor diferencia a la hora de reposicionarse: cuando sufren un quiebre, ahí está el rayo para acelerar, frenar la carrera del rival y volver a empezar. Así impidió que España abriera el tanteador en la última jugada de un primer tiempo que terminó sin puntos.
El equipo español terminó con un jugador menos por la expulsión de Roberto Ponce, por un tackle ilegal contra Germán Schulz.
“Tuvimos dos posesiones adentro de las 22 y no pudimos marcar. Ahí se nos trabó el partido. Si marcábamos, creo que podíamos haber fluido un poco antes”, destacó Tobías Wade, que valoró la mentalidad del equipo para adaptarse a las circunstancias. “Se trabajó hasta el final, aguantamos bien ese minuto y medio del final con mucha templanza. Aunque no apareció el ataque, la defensa estuvo y el equipo se mantuvo siempre en el partido”, agregó post partido en ESPN.
Las conexiones que caracterizan a este equipo en ataque no aparecieron. Estuvieron erráticos en imprecisos para construir fases, pero Luciano González se las arregló para hacer de las suyas: rompió dos tackles, quebró la línea de ventaja y, cuando lo bajaron, asistió desde el piso a Joaquín Pellandini, que se la entregó a Marcos Moneta para el único try de la semifinal. El wing acumula 14 en la temporada, sólo por detrás de Joji Nasova en la tabla de máximos anotadores.
La victoria argentina tiene el valor agregado de hacerlo ante un rival directo en el ranking que definirá el campeón de la liga (el campeón de la temporada general se decidirá en la gran final de los Ángeles). España, un seleccionado en pleno crecimiento en la disciplina alcanzó las semifinales en los cuatro torneos de la temporada y llegaba como líder de la tabla anual igualado con Argentina y Fiji. Pase lo que pase en la final, los conducidos por Santiago Gómez Cora (aunque en este certamen está a cargo Leandro Gravano), quedarán como únicos punteros, a dos torneos del final.
Los Pumas 7s ganaron 14 de sus últimas 15 semifinales, un récord notable que marca el aplomo del equipo para afrontar estas instancias. En Vancouver llevan 23 encuentros sin derrotas, en un estadio que se convirtió en una fortaleza y un bastión de este plantel. Buscarán su cuarto título consecutivo y el rival será Sudáfrica, que logró un triunfo épico contra Fiji en la última pelota, con un jugador menos durante gran parte de la semifinal. El duelo por el título comenzará a las 22.05 (hora argentina).
Los Blitzboks son uno de los rivales que los Pumas 7s aún no pudieron superar en una final. Perdieron en Cardiff 2003, Singapur 2004, Ciudad del Cabo 2015, Málaga 2022 y Dubai 2023. El BC Place podría ser un buen lugar para romper la racha.
Como se dijo, los Pumas tienen una relación muy especial con este certamen. Llegaron aquí como tricampeones vigentes, con victorias en 2022 (29-10 a Fiji en la final), 2023 (33-21 a Francia) y 2024 (36-12 a Nueva Zelanda).
El camino hasta la semifinal, en una zona con rivales muy exigentes, también se sorteó de manera invicta este año. Tras el sencillo triunfo ante Kenia (24-0), quedaron atrás Gran Bretaña (19-14) y Francia (12-5). En cuartos de final, otra vez los Bleus fueron el adversario y fue el resultado más ajustado de todos, para ganar con un try de Matías Osadczuk en la final play (12-7).
El torneo masculino muestra hasta este momento una paridad pocas veces vista en la historia del World Sevens Rugby. Hasta este torneo, Fiji, la Argentina y España comparten la primera posición con 48 puntos. Y los sigue Sudádrica, con apenas 4 puntos menos.
El sistema de competición le entrega 20 puntos al campeón de cada etapa. El segundo suma 18; el tercero, 16, y el cuarto, 14. Por el momento, los ganadores fueron: Fiji, en Dubai; Sudáfrica, en Ciudad del Cabo, y la Argentina, en Perth.