Se despejaron los interrogantes. En la antesala de la Copa del Mundo 2026 habrá un aperitivo fuerte. Se confirmó fecha y lugar para la Finalissima, que enfrentará a Argentina y España, campeones de la Copa América y de la Eurocopa, respectivamente. Después de largas negociaciones entre las federaciones, Conmebol y UEFA, se resolvió la realización de este partido para el 27 de marzo del año próximo, a las 15, hora de la Argentina, en un escenario muy especial para el conjunto de Lionel Scaloni: el estadio Lusail, de Qatar, donde el equipo albiceleste se coronó campeón del mundo hace exactamente tres años: el 18 de diciembre de 2022.
Las posiciones de los entrenadores de ambas selecciones es dispar respecto de la realización de este partido. Desde España siempre mantuvieron el optimismo de que era posible un acuerdo entre las confederaciones (UEFA y Conmebol) y las federaciones (AFA y RFEF).
Luis de la Fuente, técnico de España y uno de los profesores de Scaloni cuando el argentino hizo el curso de entrenador en Madrid, le dijo a LA NACION en Washington, el día del sorteo del Mundial, respecto de la realización de este partido: “Yo solo puedo hablar, como responsable de mi opinión, que a mí sí me gustaría jugar el partido. A mí me encantaría jugar esa Finalissima contra Argentina“. Y agregó: ”El significado que tiene, por muchos motivos… jugar contra el campeón del mundo, campeón de América. Y porque además tengo una gran admiración y una gran amistad, como saben, con Leo [Scaloni]. Y eso me hace muy feliz».
Ahora bien, la mirada de Scaloni está lejos de coincidir con la del entrenador de la selección de España: “Hubo tiempo para hacerla antes. España no pudo por la Nations League, que la inventaron ellos, y a Sudamérica nos mató. Hubiese preferido no jugar la Finalísima antes del Mundial”, comentó en una conferencia de prensa, hace dos meses. Su postura no cambió, aunque el paso del tiempo lo obligó a resignarse.
No es sólo una incomodidad para el entrenador de la selección argentina: la FIFA tampoco quería que se realice la Finalissima, ya que la fecha de este choque coincide con los repechajes para la Copa del Mundo. Ni deportiva ni comercialmente era conveniente para la FIFA esta definición que, por otra parte, no está reconocida oficialmente por por la casa de Zurich, pero sí por Conmebol y por UEFA.
El diario AS revela que la Real Federación Española de Fútbol acordó recibir unos 3 millones de euros por el enfrentamiento con Argentina y que esa cifra es el mayor caché de la historia por un solo partido jugado por su selección. El partido puede ser el antecedente inmediato a un posible cruce en el Mundial: si uno de los dos gana su grupo y el otro termina segundo en el suyo, deberán enfrentarse en dieciseisavos de final. En cambio, si los dos ganan su zona, solo podrán enfrentarse en la final, el 19 de julio, en Nueva Jersey.
España llegará al duelo no solo como vigente campeona de Europa, sino que además ocupa actualmente el puesto número uno en el ranking FIFA por delante precisamente de Argentina. El último duelo oficial entre ambas selecciones data de marzo de 2018, cuando se enfrentaron en un partido amistoso en Madrid, con victoria para España por 6-1. Un cachetazo, sin Messi en la cancha, que hizo temblar al equipo que dirigía Jorge Sampaoli y sería eliminado por Francia en los octavos de final del Mundial de Rusia de ese año.
El historial entre ambas selecciones marca 14 enfrentamientos, con seis victorias para cada equipo y dos empates. Uno solo de esos duelos se dio en una Copa del Mundo: en 1966, la selección argentina se impuso por 2-1 ante España, en la etapa de grupos, en Inglaterra.
El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF),Rafael Louzán, dijo hace unas horas: “Esa unión e ilusión se volverán a ver en el mes de marzo en la llamada Finalissima. Hemos cerrado un acuerdo con la UEFA y estamos a la espera de la confirmación oficial. Este torneo, que une las asociaciones de UEFA y Conmebol, enfrentará a los campeones de Europa y América».
Este duelo además tendrá como principal atractivo ver frente a frente a Lionel Messi y a Lamine Yamal, las dos máximas estrellas de las dos selecciones. El equipo por Luis De la Fuente terminó como líder e invicto de su grupo de las eliminatorias europeas.
La última Finalissima fue ganada por Argentina en 2022, cuando goleó por 3-0 a Italia en Wembley con anotaciones de Di María, Dybala y Lautaro Martínez. El equipo albiceleste es el máximo ganador de este torneo con dos títulos, lo sigue Francia con uno. Esta cita intercontinental se había dejado de disputar desde 1993 (cuando Argentina, con Maradona de capitán, le ganó a Dinamarca en Mar del Plata) y se volvió a jugar en 2022.
“Este partido emblemático es más que una competición; es un símbolo de cooperación y respeto entre confederaciones, y una oportunidad para que los aficionados disfruten de un acontecimiento verdaderamente histórico”, destacó el Presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez.
El presidente de la UEFA, Aleksander Čeferin, afirmó: “Este partido simboliza la unión de dos continentes futbolísticos y demuestra el alcance global de nuestro deporte en un encuentro de enorme prestigio. Esperamos vivir una velada inolvidable de fútbol de élite y celebración internacional”.

