así detuvo el régimen de Nicolás Maduro a María Corina Machado tras su encendido discurso en Venezuela

María Corina Machado acababa de dar el discurso con el que rompió 133 días de clandestinidad en Venezuela, una situación a la que la arrinconó el régimen de Maduro con la inhabilitación electoral y la persecución política. Acababa de hablar con los cronistas, en una improvisada rueda de prensa, aún sobre el techo de la camioneta desde la que habló a sus seguidores. Ya estaba arriba de una moto, con ropa oscura y casco. En ese momento, con el clima caliente de días agitados y tensos, el chavismo cerró el cerco y en un operativo violento secuestró a la principal dirigente opositora en Caracas.

Machado reapareció en Chacao, norte de Caracas. Emergió de la multitud y habló a sus seguidores en medio de un gran despliegue militar que asedió la manifestación. Después, la secuestraron agentes de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), la misma fuerza que detuvo a Nahuel Gallo, el gendarme argentino.

Por la tarde, pasadas las 15, ya estaba dando un enérgico discurso, cuando la oposición comenzó a denunciar vía redes sociales que el régimen de Nicolás Maduro asediaba las manifestaciones, con especial ahínco en aquella en que participaba Machado.

«Nunca en mi vida me había sentido tan orgullosa: en toda Venezuela la gente salió a la calle. Yo quiero vivir esto [el eventual gobierno de Edmundo González Urrutia] ya. Venezuela cambió para siempre, y el régimen se hundió, colapsó. La libertad salió a flote. La demostración que el país superó el miedo son ustedes aquí hoy«, expresaba Corina Machado ante la multitud que la rodeaba.

Y arengaba: «Hagan lo que hagan mañana se terminan de enterrar, es la prueba de fuego para condenar a este sistema. Lo que hagan mañana sentenciará el final del régimen. Estamos a partir de hoy en una nueva fase. Les pido, tengamos esto claro: Venezuela ya decidió, Venezuela es libre«.

Altoparlantes con música a altísimo volumen que competían con los que transmitían, desde la calle, el discurso de Machado. Todos estaban cercados por columnas de militares y una retahíla de agentes de la Policía Nacional Bolivariana, por patrulleros, motos y hasta drones.

La periodista local Carla Angola precisó, en su cuenta de X: «El régimen secuestró a María Corina. 17 motos, drones y camionetas jeep dispararon a las motos que la trasladaban, los tumbaron, hirieron a uno de los motorizados y se lo llevaron junto a ella».

Según el propio entorno de Machado, fue interceptada de forma violenta y hubo disparos contra los motociclistas. Uno de ellos habría terminado herido.

Otras fuentes, como el medio local La Patilla, uno de los que tratan de saltar el cerco informativo del régimen, sindican a la Dirección General de Contrainteligencia Militar el secuestro de la líder opositora venezolana. En nuestro país, esta fuerza del gobierno de Maduro es conocida por haber sido, según informaron las propias fuentes oficiales, la que detuvo al gendarme argentino Nahuel Gallo, que desde diciembre pasado continúa en prisión acusado de terrorismo.

El propio Comando con Venezuela, partido político de la que Machado es principal figura, se pronunció en sus redes sociales para informar del secuestro: «María Corina Machado fue violentamente interceptada a su salida de la concentración en Chacao. Esperamos confirmar en minutos su situación. Efectivos del régimen dispararon contra las motos que la trasladaban«.

Este viernes es la fecha estipulada para la ceremonia de toma de posesión de la presidencia de Venezuela, que nuevamente se arrogó Nicolás Maduro, luego de las elecciones del pasado 28 de julio, bajo un manto de notorias irregularidades. También Edmundo González Urrutia, presidente electo, prometió aparecer en Caracas este viernes para su asunción. Sobre él recae un pedido de captura que emitió el régimen de Maduro.

Ambos también habían denunciado asedio previo al jueves: María Corina Machado había hecho público que el régimen acosaba a su familia y agentes de las fuerzas merodeaban las casas, mientras que González Urrutia hizo lo propio y denunció esta semana la detención de su yerno.

«Derribamos todas las barreras que lo dividían no hay otro país en el planeta tierra unido como Venezuela», comenzó su discurso Machado a sus seguidores, luego de aparecer este jueves tras 133 días de clandestinidad obligada. Estaba subida al techo de una camioneta, desde donde brindó un discurso arengador.

A la vez que continuó: «Lo único que les queda es tratar de sembrar el miedo. Sabemos que aquí empieza la fase final. Toda esta fuerza que hemos construido y que crece día a día nos prepara para terminar esta fase final. Hagan lo que hagan, se terminan de enterrar».

«El 28 de julio nos dijeron que era imposible, con toda la trampa del régimen, con la represión, con el control de esa institución que tienen arrastrada por el suelo que es el Consejo Nacional Electoral, nos dijeron que era imposible derrotar a esta tiranía. Y ese día, nosotros le dijimos a la venezolanos que nos encontrábamos a las 5 de la mañana porque la noche anterior las colas estaban en los centros de votación», hizo hincapié en la concurrencia de venezolanes en los lugares de votación durante las últimas elecciones.

«Toda esta fuerza que hemos construido cada día nos prepara para terminar esta fase final. Hagan lo que hagan se terminan de enterrar», dijo la popular líder opositora con un micrófono y flores en su mano izquierda.

Y cerró: «La prueba de fuego que termina de condenar a este sistema, que nadie tenga dudas, lo que hagan mañana sentencia el final de régimen. Si consuman ese crimen a la Constitución y a la soberanía popular estarán sentenciando su destino. Estamos, a partir de hoy en una nueva fase. Vivimos una Navidad de profunda reflexión, estamos los venezolanos unidos. Yo les pido que tengamos claro: ¡Venezuela ya decidió, Venezuela es libre!«, arengó Machado, mientras la música del chavismo empezaba a zona más fuerte.