Uruguay volverá a las urnas el domingo 24 de noviembre para definir a su próximo presidente en un balotaje entre Yamandú Orsi, del Frente Amplio, y Álvaro Delgado, del Partido Nacional. Ninguno de los candidatos logró superar el 50% de los votos en las elecciones del 27 de octubre, lo que obliga a una segunda vuelta electoral.
Yamandú Orsi, candidato del Frente Amplio, lideró la primera vuelta con el 43,9% de los votos, seguido por Álvaro Delgado, del Partido Nacional, con un 26,7%. Aunque Andrés Ojeda, del Partido Colorado, obtuvo un 16%, el apoyo de los votantes colorados y otras agrupaciones menores podría inclinarse hacia Delgado, reforzando la coalición oficialista.
Además de la elección presidencial, el domingo 27 de octubre, los uruguayos votaron para renovar la Cámara de Diputados y Senadores, como ocurre cada cinco años. A diferencia de otros países, Uruguay no tiene elecciones de medio término, lo que significa que todas las bancas legislativas se renuevan simultáneamente.
En esta jornada también se sometieron a consulta dos propuestas populares relacionadas con la seguridad social: una buscaba reducir la edad de jubilación de 65 a 60 años, y otra pretendía eliminar el sistema de jubilación privada. Ambas propuestas fueron rechazadas.
Desde 2005, todos los presidentes uruguayos —tanto del Frente Amplio como del Partido Nacional— han gobernado con mayoría legislativa, una tradición política que podría repetirse dependiendo del desenlace en noviembre.
Para el 24 de noviembre, los uruguayos deberán regresar a sus centros de votación habituales. Allí se decidirá si el país retorna al liderazgo del Frente Amplio o consolida la continuidad del oficialismo con Delgado.