Qué son los «swing states» y por qué decidirán quien gane las elecciones en Estados Unidos 2024

De cara a las elecciones presidenciales de Estados Unidos, las encuestas arrojan panoramas sobre lo que podría suceder en las urnas el martes 5 de noviembre.

Hay algunos estados que se consideran bisagra en la contienda debido a que podrían definir el resultado de las votaciones. Su tendencia hacia Kamala Harris y Donald Trump no es clara.

El resultado en los llamados “estados indecisos”, donde la diferencia de votos entre los candidatos es muy ajustada, puede ser crucial para la definición de las votaciones.

Estos estados podrían inclinarse tanto a favor de la demócrata Kamala Harris o del republicano Donald Trump debido a que los estados bisagra carecen de una inclinación clara hacia un partido. Por lo que su apoyo pueden variar de una elección a otra. Ese es el motivo por el que se convierten en territorios clave para el resultado de las elecciones.

En este contexto, el candidato que logre la victoria en un estado, aunque sea por una corta ventaja, obtiene todos los votos del Colegio Electoral correspondientes a ese distrito.

El sistema electoral de Estados Unidos establece que los integrantes del Colegio electoral son quienes definen quién será el próximo presidente. Con un total de 538 miembros en en este organismo, un candidato necesita alcanzar al menos 270 votos para ganar.

Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin son los estados bisagra en los que los márgenes de victoria son estrechos y donde ambos partidos tienen una posibilidad razonable de ganar.

Aunque Arizona eligió a Biden en las elecciones de 2020, en años anteriores respaldó a candidatos republicanos, incluido Trump en 2016. Actualmente, sus 11 votos electorales son cruciales.

Siendo un estado fronterizo con México, la inmigración es un tema relevante para los votantes, si bien disminuyeron en el último tiempo recientemente hubo un aumento histórico de cruces fronterizo. Trump promete realizar una «amplia deportación» si regresa a la Casa Blanca, mientras que Harris advierte que tal política sería un «riesgo» para el país.

Georgia, con una gran población afroamericana, fue clave para la victoria de Biden en 2020. La campaña Harris-Walz busca repetir el éxito, mientras los republicanos se enfocan en atraer votantes cruciales en el área metropolitana de Atlanta. Sus 16 votos electorales son esenciales para ambos partidos.

Por su parte, Michigan, con 15 votos electorales, es otro estado decisivo. Allí, la guerra en Gaza es un tema central, especialmente entre la numerosa comunidad árabe-estadounidense, cuyo apoyo a Biden ha disminuido por su postura pro-Israel.

Nevada representa solo seis votos electorales. Según datos del Departamento de Empleo, Capacitación y Rehabilitación, este estado enfrenta la mayor tasa de desempleo del país, alcanzando alrededor del 5,1%,

En este contexto, el candidato republicano propone una agenda de impuestos más bajos y menos regulaciones. Por su parte, la aspirante presidencial demócrata se enfoca en fortalecer la clase trabajadora, prometiendo aumentar el salario mínimo durante un mitin en Las Vegas. Sin embargo, las preocupaciones económicas podrían inclinar a algunos votantes hacia el candidato republicano.

En Pensilvania la economía es un tema clave. Aunque la inflación general disminuyó y la economía muestra crecimiento y creación de empleo desde la llegada de Biden, el aumento acelerado en los precios de los alimentos se acentúo.

Este alto costo de vida podría perjudicar a Harris en este y otros estados, ya que algunos de los factores que lo provocaron son las secuelas comerciales de la pandemia y los daños a las cosechas por sequías y tormentas.

Este estado bisagra, que aporta 19 votos electorales, votó por el candidato demócrata desde 1992 hasta 2012, pero en 2016 dio un giro al lado republicano cuando respaldó a Trump.

Carolina del Norte, que cuenta con 16 votos electorales, tiene preocupaciones similares a las de su vecino Georgia y a Arizona, especialmente en temas como la inmigración y la economía.

Desde 2008, cuando Obama fue elegido, ningún candidato presidencial demócrata ha logrado triunfar en este estado. En las elecciones más recientes de 2020, Donald Trump fue el ganador.

Finalmente, Wisconsin es un estado crucial en el colegio electoral, aportando 10 delegados. En casi todas las elecciones presidenciales de este siglo, el resultado se definió por menos del 1%. Sin embargo, según The Associated Press, en 2020 Donald Trump perdió Wisconsin por un estrecho margen de menos de 21,000 votos.