Las personas que visitaron el stand de Salud Mental fueron invitadas a expresarse de diversas maneras: escribiendo en tarjetas aquello que les hace bien y potencia su energía; registrando con una foto un mensaje o grabando en video unas palabras emotivas para alguien especial.
De la actividad participaron niños, adolescentes y adultos compartiendo experiencias personales y deseos cotidianos sobre aquello que los fortalece: jugar al fútbol, caminar con amigos, andar en bicicleta, leer o pasar tiempo con personas significativas.
Esta iniciativa despertó un gran interés en todas las familias, ya que ofreció un espacio único de reflexión, expresión personal y colectiva.


