Sucedió de nuevo: la polémica acompañó una vez más a Barracas Central, el club que supo ser conducido por Claudio Chiqui Tapia, el presidente de la AFA. El Guapo estuvo muy cerca de volver al triunfo después de varias fechas, pero debió conformarse con un vibrante 2-2 en cancha de Tigre. Eso sí: una jugada muy discutida -un penal no cobrado para el Matador- volvió a salpicar el desempeño del equipo dirigido por Rubén Darío Insua.
La gran controversia de la noche llegó a los 18 minutos, con el resultado 0-0. Joaquín Laso metió un pelotazo cruzado, a espaldas de los centrales. Nacho Russo picó habilitado, y Kevin Jappert, en un intento desesperado, tomó de la camiseta al delantero de Tigre, que cayó aparatosamente. Es posible que, por la velocidad de la jugada, Baliño no haya podido seguir de cerca la acción. Pero sí debió haberlo advertido Héctor Paletta, que estaba a cargo del VAR. En las imágenes de las repeticiones estaba claro el agarrón, se observó cómo quedaba estirada la casaca de Russo, y cómo el delantero perdía estabilidad. No hubo revisión, y no se cobró el penal que correspondía. “Yo creo que fue penal. Obviamente hay un poco de mí que me tiro, pero creo que es penal”, dijo el hijo del recordado Miguel después del encuentro.
Esa jugada se produjo en el momento más favorable a Tigre, con el partido todavía 0-0, cuando el local llegaba con riesgo sobre el área del Guapo. Un rato antes, Martínez había tenido una doble chance muy propicia dentro del área, pero le faltó precisión, con un disparo que fue directo al pecho de Jappert.
Por el contrario, Barracas no perdonó cuando tuvo su oportunidad y facturó en su primera llegada. A los 27 minutos, Iván Tapia ejecutó un tiro de esquina desde la izquierda, Jhonatan Candia se desprendió de su marca y llegó solito por el medio: cabeza potente, pique al piso, inalcanzable para el indefenso Zenobio.
Quedó algo desconcertado el local por la desventaja. El arquero cometió un blooper en la salida y dejó corto un despeje; Ruiz tomó la pelota, pero eligió un zurdazo desviado cuando Candia entraba sin marcas por el medio del área.
Todavía más se le iba a complicar el panorama al equipo de Dabove: sobre la media hora, Elías Cabrera fue abajo con las dos piernas contra Tapia. Baliño le sacó tarjeta amarilla al volante de Tigre, pero Paletta, desde el VAR, revisó la jugada y convocó al árbitro. La decisión final fue cambiar el fallo: roja para Cabrera -correcta- por juego brusco grave. Tigre, con uno menos cuando le quedaba casi una hora al encuentro.
Hubo más: apenas comenzado el segundo tiempo, el local alcanzó la igualdad en un centro cruzado, que Medina empujó a la red. Pero había fuera de juego previo de Russo, bien observado por el segundo asistente.
A pesar de jugar con uno menos, Tigre se las arregló para tratar de llegar al empate. Barracas buscó defender la ventaja sin retroceder en exceso, con pases laterales, y trataba de bajarle intensidad y ritmo a la noche en Victoria.
Pero Tigre no se rendía. Dabove mandó a la cancha a Medina, Sosa y Oviedo, y el local tuvo más movilidad para sacudir la estructura de Barracas. Y los últimos minutos se llenaron de emociones.
El local empató en un tiro de esquina abierto de Sosa que sorprendió a la defensa visitante; Nacho Russo le ganó a su marca con una pirueta y sacó un remate cruzado. Insua movió piezas sin dudar: antes de reanudar hizo entrar a Gonzalo Morales, el exdelantero de Boca. El Toro respondió en menos de un minuto: con una buena construcción colectiva, Barracas movió la pelota de un lado a otro; Siro Rosané encontró espacio e hizo circular un pase frontal por el medio, Candia no llegó, pero sí entró Morales para definir muy bien ante Zenobio y marcar el 2-1 para Barracas.
El Guapo ya saboreaba los tres puntos. En tiempo de descuento, Morales recibió dentro del área y sacó un zurdazo que movió el palo izquierdo. Tigre, contra el reloj, con uno menos, perdido por perdido, fue adelante. A los 48, Laso se acomodó, mandó un centro cruzado, y Sebastián Medina entró por el segundo palo y venció a Ledesma. Protestó Barracas, pero en la revisión se vio que Rak habilitaba a todos.
Lo mejor del partido
Ninguno pudo cortar una racha poco propicia. Barracas suma cinco partidos sin ganar, incluidos cuatro empates en el camino, y así recibirá a Boca el lunes próximo en el estadio Tapia. Tampoco pudo Tigre, con cinco encuentros sin festejos y tres empates en fila. Así y todo, con la paridad que reina, los dos están todavía en zona de clasificación en un grupo A con once equipos separados por apenas cuatro puntos. Con polémicas incluidas, Barracas y Tigre se sumaron a esa igualdad.