Resultó un fin de semana para el olvido para Alpine. El Gran Premio de México, en el Autódromo Hermanos Rodríguez, volvió a desnudar los problemas que tiene la escudería con sus monoplazas y tanto Pierre Gasly como Franco Colapinto sufrieron en la pista la falta de rendimiento de sus vehículos. En ese escenario la palabra de Steve Nielsen, el team manager del equipo, permite comprender lo que fue estar a bordo del A525 y valoró el desempeño del piloto argentino
La decepción de Colapinto fue total, ya que terminó en el decimosexto lugar. Alpine volvió a dividir las estrategias y el piloto argentino estuvo a menos de un segundo de distancia de Pierre Gasly, pero no pudo superarlo en la última vuelta por la entrada del auto de seguridad. Las conclusiones de la escudería se enmarcaron en las respuestas de un coche incapaz de ser competitivo: “Sabíamos que sería una tarde complicada y se confirmó que así fue en México. Todo el mérito debe ir tanto a Pierre como a Franco por darlo todo en una situación difícil, donde el coche era complicado de manejar y prácticamente no había nada por lo que pelear en pista”, reconoció Nielsen luego del GP de México.
Y agregó: “En cuanto a la estrategia, nos adaptamos a la mitad de la carrera y arriesgamos con Pierre al cambiar al compuesto blando, mucho antes de lo óptimo, tras ver que otros coches lograban hacer que los neumáticos duraran más de lo esperado. En ese momento, sabíamos que Franco con los duros duraría más y que ambos coches eventualmente se encontrarían hacia el final de la carrera”.
Las palabras de Nielsen marcan, además, el pulso del clima interno en Alpine, que en la previa era algo tenso. Es que después de la controversia en torno a las órdenes de equipo y el posterior adelantamiento de Colapinto a Gasly en el Gran Premio de Estados Unidos, el director del equipo se había mostrado muy molesto con el argentino por desobedecer una orden directa.
Sin embargo, tras la carrera en México, Nielsen reconoció que ambos pilotos tenían carta libre para luchar entre ellos. “Con los líderes acercándose con banderas azules, gestionamos ambos coches de manera igual y cuidadosa para no interferir con quienes nos estaban doblando, al mismo tiempo que les dimos la oportunidad de competir al menos por posiciones sin asumir riesgos innecesarios”, explicó el líder de Alpine.
Luego de la carrera, Franco Colapinto en la misma línea de bajar las tensiones hizo una evaluación de su performance, en la que se enfocó en la estrategia que utilizaron: “Hice 50 vueltas arrastrándome, sin nada de grip. Después con las blandas anduve bien, pero era muy tarde. Fue una carrera sin mucho ritmo y muy larga para nosotros, como equipo no teníamos ritmo y nos costó mucho, así que tenemos que trabajar para la próxima”.

