El Pleno del Congreso aprobó este miércoles una proposición no de ley del PP con la que se insta al Gobierno a reconocer al candidato opositor Edmundo González Urrutia “como el legítimo ganador” de las elecciones presidenciales de pasado 28 de julio en Venezuela y, por tanto, como presidente electo y legítimo“ del país.
El mandato salió delante con el apoyo del PP, Vox, PNV Coalición Canaria, Unión del Pueblo Navarro y el voto en contra del PSOE, Sumar y los socios habituales del Gobierno. Eso, Junts no ha participado en la votación porque sus diputados han abandonado el Congreso para asistir a las movilizaciones por la Diada y el exministro socialista, José Luis Ábalos, ha optado por la abstención, desmarcándose de su antiguo partido.
La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, había informado el sábado por la noche que el abanderado de la mayor coalición opositora había abandonado la nación caribeña, con un salvoconducto concedido «en aras de la tranquilidad y paz política».
Tras la partida del excandidato presidencial, la principal líder opositora venezolana, María Corina Machado, afirmó que ella seguirá luchando desde Venezuela mientras que Edmundo González Urrutia, lo hará «desde afuera».
Tras las elecciones del 28 de julio, en las que el ente electoral otorgó la victoria a Maduro, se desató una crisis política, debido a que la oposición asegura que fue González Urrutia quien ganó, una afirmación que respaldó con las copias del «83,5 % de las actas electorales.
El texto aprobado en el Congreso español especifica que este ”reconocimiento se basa en la reiterada negativa de las autoridades electorales venezolanas a publicar los resultados en tiempo y forma, la publicación por parte de la oposición del 83,5 % de las actas verificables que demuestran un categórico resultado electoral, y los pronunciamientos oficiales de instituciones internacionales como el Centro Carter, Naciones Unidas, y el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Seguridad, el español Josep Borrell.
De esta forma, el Congreso exige no solo el reconocimiento de Edmundo González como presidente “legítimo”, sino que también insta al Ejecutivo a liderar el este reconocimiento en las instituciones europeas e instancias internacionales, con el objetivo de asegurar que el 10 de enero de 2025 tome posesión como presidente venezolano.