Tras ganar fama en tierras valencianas la mascletá se extiende hacia nuevas latitudes. Con polémica incluida. A Madrid y Burgos, que ya han celebrado las suyas este año, se le sumará en breve Valladolid, otro municipio que ha decidido completar su cartel de festejos con una tradición más propia de Levante. Y al igual que ocurrió en Madrid o Burgos lo hará en medio de un considerable revuelo tan o incluso más sonoro que el espectáculo pirotécnico, para el que ya ha reservado 150 kg de pólvora. Hay quienes cuestionan su encaje en la tradición pucelana y quienes advierten del perjuicio que causará a los animales y la gente sensible al ruido.
La mecha se prenderá el domingo por la noche.
Un cartel con novedades. El 25 de julio fue una jornada importante en Valladolid. El Ayuntamiento, con su alcalde a la cabeza presentó el programa de la Feria y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo, una cita con sorpresas incluidas.
Además de pregón, conciertos, feria gastronómica, peñas y un peculiar récord Guinness, la organización ha decidido volcarse con los espectáculos pirotécnicos, con ocho sesiones de fuegos artificiales a lo largo de la semana y «dos novedades». La primera, el sábado 31, fue un espectáculo de drones con 300 dispositivos. La segunda, reservada para este domingo como broche de oro, será «una mascletá nocturna» con fuegos artificiales durante la que se usarán 150 kg de pólvora.
¿Mascletá pucelana? Exacto. La apuesta era una de las novedades de la programación y así lo destacó tanto el Ayuntamiento como las agencias que cubrieron la presentación. Con todo y aunque la mascletà está más asociada a la Comunidad Valenciana, Valladolid no será el primer consistorio del centro peninsular que ha decidido añadir una a su cartel de festejos de 2024.
A principios de año José Luis Martínez-Almeida decidió celebrar una en la capital con más de 300 kilos de pólvora, recuperando una tradición efímera del Madrid de principios de los 80. Lo mismo ocurrió en Burgos a principios de verano, durante la fiesta de los Sampedros. El Correo de Burgos aseguraba por entonces que el espectáculo con pólvora había regresado a la ciudad «después de años».
«Tendrá serias repercusiones». La mascletá vallisoletana tendrá algo más en común con la de Madrid y Burgos que su generoso despliegue de pólvora. Al igual que sus dos precedentes ha llegado acompañada de críticas que la cuestionan por su falta de arraigo y, sobre todo, las molestias que el espectáculo acarreará tanto para los animales como la población más sensible al estruendo.
«Tendrá serias repercusiones para la salud de las personas con hipersensibilidad acústica y trastornos del espectro autista, así como para niños, niñas y pacientes con enfermedades crónicas», lamentaba hace días el concejal de Valladolid Toma la Palabra (VTLP) Jonathan Racionero. La pirotecnia, insistía el edil pucelano, se traducirá además en «graves prejudicios» para mascotas y animales salvajes.
«Me parece una chorrada». La frase es de Jesús Colás, socio de la organización SEO Birdlife y quien hace poco compartía con El País sus recelos sobre la mascletá organizada por el Gobierno muinicipal pucelano. El escenario escogido para el espectáculo, recuerda, queda cerca de un cerro, es hogar de aves rapaces.
«Durante los fuegos artificiales hemos visto casos de alguna estampado contra edificios porque huyen», advierte. Más allá de su impacto, reconoce que a él, «como castellano», le parece «una chorrada». «Igual en Valencia tiene su aquel».
Más allá de Valladolid. El debate en torno a los espectáculos con pólvora y las molestias que ocasionan a personas con hipersensibilidad acústica o trastorno del espectro autista, además de a la fauna, tanto doméstica como silvestre, va mucho más allá de Valladolid, la comunidad de Castilla y León o incluso España.
En otros puntos del país se han suspendido ya fiestas con fuegos artificiales o alegando «motivos éticos». En Suiza ha llegado a debatirse sobre su desaparición, en Argentina se activó hace unos años una recogida de firmas que va camino ya de las 190.600 y en Bélgica se han planteado el uso de pirotecnia «silenciosa».
Reglado, seguro y breve. Las cosas se ven distintas en el Ayuntamiento vallisoletano. Su edil de Turismo, Blanca Jiménez, salía hace poco al paso de las críticas argumentando que la mascletá de la ciudad será «una actividad reglada y segura» que solo se diferenciaría de un espectáculo de fuegos artificiales al uso por «unos minutos» de estruendo. «Todos aceptamos que son días especiales y se generaliza la supresión de los límites», enfatiza la concejala de Turismo.
A las personas más sensibles al ruido y sus familiares les agradece su «generosidad» e insiste en que el mayor estruendo de la mascletá durará únicamente «tres o cuatro minutos». Sobre la falta de arraigo, replica que Valladolid tiene «vocación universal». «La gente aprecia la diversidad».
Imágenes | Premsa Ajuntament de Torrent (Flickr), Santiago López-Pastor (Flickr) y Keith Ellwood (Flickr)