Hay una gran guerra librándose ahora mismo. Es la guerra de la eficiencia. Queremos más tiempo libre para nuestros hobbies, pero tenemos que atender tareas, encargos, responsabilidades, proyectos… Por otro lado, si alguna vez has probado a trabajar —o jugar— con un ordenador más rápido que el tuyo, te habrás dado cuenta de lo difícil que es volver a los tiempos de carga lentos. Una prueba a la paciencia que automáticamente te recuerda los muchos minutos que pierdes cada día.
Un PC IA es un ordenador vitaminado por IA. Mientras que en los 80 y 90 los PC se definían por su capacidad de cálculo y almacenamiento, hoy los nuevos PC IA de MSI integran algoritmos que aprenden de nosotros a medida que los usamos
Y ahora pensemos en los nuevos PC IA —si no sabes lo que son, no te preocupes, luego profundizamos en ellos—. Esos equipos nacen con el objetivo de reducir a casi cero todas estas pausas y estos procesos de rutina. Claro, cuando piensas en usar la IA generativa, también descubres una cara oculta: alta demanda energética. Algo que solemos hacer en casa, siempre conectados a la red y obligatoriamente a la corriente, incluso dejando el equipo en pausa mientras se encarga de algo tan pesado como renderizar una hora de cortes en resolución 4K.
Para dar solución a ambos problemas, MSI ha estado trabajando en una nueva flota de portátiles con una NPU de, al menos, 40 TOPS de velocidad, considerados ‘Copilot+ PC’ por la propia Microsoft. Estos portátiles ejecutan cualquier tarea de manera más eficiente, reduciendo el consumo de potencia y batería, teniendo en cuenta el desempeño y autonomía de cada equipo.
MSI, marca muy reconocida y particularmente asociada al mundo gaming, presenta con estos equipos una innovación capital en la industria del PC. Y lo hace a través de un puñado de herramientas que merece la pena repasar.
¿Qué es un PC IA?
Imaginemos un cerebro dentro de una máquina, una NPU (Unidad de Procesamiento Neuronal). Este chip especializado, integrado en el procesador principal (CPU), está diseñado para manejar cargas de trabajo de IA a la máxima velocidad y eficiencia. No en vano, intentan emular la mejor máquina de la naturaleza, nuestro cerebro. Esta velocidad, por cierto, se mide en TOPS (Tera Operations Per Second, unidad de medida que cuantifica el rendimiento de un sistema de computación). Y este «cerebro» es lo que distingue a los PC con IA de los tradicionales.
En resumen, un “PC IA” es un ordenador vitaminado o potenciado por inteligencia artificial. Así de simple, y así de complejo. Mientras que en los 80 y 90 los PC se definían por su capacidad de cálculo y almacenamiento, hoy la clave está en su inteligencia. Los nuevos PC IA de MSI integran algoritmos que aprenden de nosotros a medida que los usamos.
¿Has oído hablar del boom de la IA en los años 50, cuando solo era posible en novelas de ciencia ficción? Pues esta tecnología, que pasó por hitos como el aprendizaje profundo en los 2000 y la creación de modelos como GPT y DALL-E, ahora se concentra en una sola máquina capaz de adaptar su rendimiento a las necesidades de cada usuario.
Por qué necesitamos ordenadores con IA
Un PC IA no solo obedece órdenes, sino que intuye patrones de uso y optimiza tareas antes de que las necesitemos. Es como si se hubieran hecho realidad las ideas de asistentes personales de las películas
En tanto el software se vuelve más dependiente de la inteligencia artificial, disponer de ordenadores que puedan manejar esta demanda es crucial. La IA no es solo una palabra, es el ingrediente fundamental que nos está haciendo progresar en todas direcciones. Por poner un ejemplo, permite integrar a una persona en una foto —una de las funciones más celebradas de Google Gemini— o crear extensiones de imágenes a partir de un prompt —algo que ya está integrado hasta en las herramientas de Adobe—.
En apenas dos años, hemos descubierto funciones de la IA que ni imaginábamos. Ya se usa para crear música, clonar voces, generar presentaciones, logos, texto, mapas mentales, avatares, editar vídeo, corregir montajes de cine, planificar viajes, generar un pitch para un videojuego, resolver problemas matemáticos, resumir una tesis o transcribir un audio. Un PC IA va más allá, porque estas NPU son increíblemente eficientes, optimizando el consumo de energía y prolongando la duración de la batería. Por establecer un símil, serían avances como los que en medicina han prolongado la vida humana.
La diferencia con los PC tradicionales es clara: un PC IA no solo obedece órdenes, sino que intuye tus patrones de uso y optimiza tareas antes de que lo necesites. Es como si las ideas de asistentes personales futuristas de las películas fueran, al fin, una realidad de escritorio. Por tanto, MSI no solo vende hardware, sino que plantea que nuestros equipos puedan trabajar de forma colaborativa, apoyados en sistemas que simplifican y agilizan desde la edición de vídeo hasta la organización de proyectos. Veamos qué equipos son.
MSI sabe cómo liderar esta carrera
Si bien la industria de los PC IA apenas acaba de arrancar, cualquier usuario puede aprovechar estas innovaciones. Por ejemplo, cuando abres Google Meet, la aplicación corrige el nivel de luz para evitar granularidad, te suavizan un poco, anula el ruido de fondo y ajusta tu rostro en el centro de la ventana. Esos son algoritmos de IA. Mientras que otras tecnologías más avanzadas, como RTX Remix, funcionan de maravilla en la remasterización de juegos antiguos —juegos que se veían a 320px y ahora renacen a 4K con ray tracing—.
El Modo Gaming de MSI optimiza automáticamente el equipo porque sabe que se está ejecutando un videojuego, así que prioriza la velocidad de cuadros y las cargas de datos y energía, con el fin de reducir el consumo en otras tareas secundarias
¿Otro ejemplo? ‘Copilot+’, el asistente de Microsoft que puede hacer buena parte de las tareas citadas más arriba. Microsoft también ha desarrollado otras aplicaciones como ‘Recall’, que te ayudan a buscar imágenes, o ‘Cocreator’, que traduce texto a imagen. O ‘Live Caption’, que traduce vídeo en tiempo real.
Los equipos MSI han dado pasos en esta dirección. Por ejemplo, el Modo Gaming optimiza automáticamente tu equipo porque sabe que estás ejecutando un videojuego, así que prioriza la velocidad de cuadros y las cargas de datos y energía, con el fin de reducir drásticamente el consumo en otras tareas secundarias. Y esto es solo la punta del iceberg, el abuelo de la automatización en tiempo real dependiendo del uso.
MSI AI Artist es una herramienta creativa que facilita la generación de imágenes. Sirve para todo: crear portadas o cartelería, composiciones, menús de restaurantes, fondos de pantalla
Por ejemplo, MSI AI Engine es toda una suite de inteligencia artificial avanzada que ajusta los recursos de hardware según el contexto de uso —ya sea jugando, trabajando online, viendo series o editando texto—. Si estás en una charla, la cancelación de ruido mejora la claridad sonora incluso en entornos ruidosos. Y siempre con la eficiencia por bandera, con el fin de raspar unos minutos u horas extra al desempeño de la batería.
Y lo mismo sucede con MSI AI Artist, otra herramienta creativa diseñada para facilitar la generación de imágenes. Tú le das el prompt o la breve instrucción y el sistema genera una instrucción más elocuente. Sirve para todo: crear portadas o cartelería, composiciones, menús de restaurantes, fondos de pantalla. Una ayuda rápida para no tener que enfrentarse al folio en blanco. Si bien la velocidad de generación varía según el modelo, MSI AI Artist simplifica todo el proceso en una interfaz limpia que nace con ese objetivo tan escurridizo: potenciar la creatividad.
Y si estuviste al tanto del NVIDIA RTX AI Event, que coincidió con las conferencias del Siggraph 2024, habrás visto que todavía hay un gran margen de progreso. Cuando NVIDIA presentó las GeForce RTX 40 SUPER, que renderizan gráficos en 4K con trazado de rayos, muchos se quedaron de piedra. Y a esto debemos sumar el DLSS (Deep Learning Super Sampling), que va ya por la versión 3.5, y el modelo NVIDIA Picasso, que ya está siendo usado para generar contenido con licencia de Getty Images —el mayor banco de imágenes del mundo—.
Justo en este evento, NVIDIA subrayaba que su plataforma RTX para dispositivos portátiles es “AI-ready”. Y MSI está aprovechando al máximo esta alianza. Así, sus familias Prestige, Summit y los potentes Stealth A16 AI+ y Creator A16 AI+ integran Copilot+ PC y los procesadores más bestias del mercado, los AMD Strix Point e Intel Lunar Lake.
Una mirada al futuro a través del presente
¿Y qué equipos son esos? En primer lugar destaca el MSI Stealth A16 AI+, el más potente de la familia Copilot+ PC. Delgado como una cartulina —basado en un chasis de aleación magnesio-aluminio–, rápido como un demonio, puesto que puede montar hasta un AMD Ryzen AI 9 HX 370, un procesador con 40 TOPS y un pico de 80 AI TOPS. Un delirio diseñado para ser el PC “todo en uno” más robusto, e ideal tanto para el trabajo como para el gaming. IA optimizada y refrigeración de primera.
En una línea similar tenemos los MSI Summit A16 AI+ y el MSI Prestige A16 AI+, equipos de élite con paneles OLED con un ratio 16:10 para ofrecer mayor ancho —para la barra de tareas—, también vestidos con Windows 11 Pro u Home. Estos portátiles ultradelgados cuentan con TPM 2.0, acceso biométrico y detección de presencia, así que son la opción idónea para cualquier entorno empresarial, dotándolos de una seguridad adicional.
Reduciendo escala pero no la ambición, encontramos el MSI Prestige 13 AI+, el benjamín de esta serie de ordenadores para creativos que prioriza la movilidad: en apenas 990 gramos encontramos la mayor batería de su gama y una eficiencia reformulada. Ya no se trata de números brutos: su NPU garantiza un 50 % más de rendimiento gráfico y acelera la CPU un 27 % respecto al anterior modelo.
Finalmente, los MSI Prestige 14 AI+ y Prestige 16 AI+ montan procesadores de 3 nanómetros, paneles FHD+ (1920 x 1200) con ratio 16:10 y 144 Hz de tasa de refresco, destacando también por su batería: hasta 25 horas de trabajo y 20 de reproducción de vídeo. La alta eficiencia es su marca personal. Algo que consiguen en parte por el NVIDIA Studio. Esta herramienta acelera tareas que demandan mucha energía, como, por ejemplo, el renderizado de vídeo —o la propia ejecución de juegos—. El MSI AI Engine siempre está en segundo plano para potenciar cada tarea.
Lo decíamos al principio: ingenieros y fabricantes están virando hacia esta dirección. Y a medida que la IA sigue moldeando el futuro del software, contar con ordenadores preparados para estos avances se vuelve esencial. MSI cubre ambos escenarios: el de los PC con IA, y el del software impulsado por IA, con el fin de satisfacer todo lo que podamos necesitar tanto para trabajar con auténtica productividad y eficiencia como para jugar o desconectar.
Se podría escribir y escribir de las muchas especificaciones en conectividad —todos estos laptops son compatibles con WiFi 7—, de los retos superados para optimizar la refrigeración, pero esta es la clave: MSI ha dado el paso necesario para ir a la vanguardia.
Imágenes | MSI